Tiempo de… Deportes 05/10/2016

El otoño es la estación en la que se reanudan los buenos hábitos: los horas regulares, la hora del té por la tarde, el deporte …

Se sabe que realizar una actividad física constante y equilibrada hace bien desde una edad temprana y si nuestro hijo sobresale particularmente en los deportes comenzarán también pequeñas carreras y competencias.

Pero antes de desatar el espíritu competitivo es importante recordar que practicar un deporte, ante todo, debe ser como jugar y divertido!

Como establece la Carta de los Derechos del Niño en el Deporte, redactada por la UNESCO en 1992, el niño tiene derecho a divertirse y jugar como un niño y el derecho a no ser un campeón.

La actividad competitiva requiere un gran compromiso de parte del niño en términos de tiempo, renunciar a otras actividades y sacrificios. Por un lado desarrolla un gran sentido del deber, pero el estrés por la excesiva disciplina, la tensión por una competencia, etc. pueden causar disturbios y ansiedad que no son buenas para nuestro hijo.

¡El objetivo de la competencia no es solo ganar! Las competencias sirven para compararse con los demás y verificar el propio nivel de preparación y habilidades.

Por supuesto la derrota también ocurre, ¡pero es esencial no criticar al niño! Analicen cualquier error pero resalten los progresos, déjenlo llorar si siente la necesidad de hacerlo, consuele y la próxima vez estará mejor.

Enseñen a su hijo que seguir un estilo de vida regular también ayuda al éxito en el deporte: dormir suficiente, comer saludable, cuidar de su cuerpo y sus pertenencias.

El compromiso deportivo también incluye material: ayuden al niño a preparar lo necesario (zapatos, uniforme, tutú, etc.) y luego dejen que él lo haga solo. Al regreso invierta la situación: que deshaga la bolsa, ponga el uniforme en el cesto de la ropa sucia, limpie los zapatos, etc.

Si se maneja bien, el deporte también puede enseñar disciplina, rigor, compromiso, deseo de mejorar y espíritu de equipo y también puede ayudar a un niño inquieto a desahogarse y... cansarse!

¡Recuerden que es importante participar, no ganar!